cristojesuselsalvador

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lunes, 28 de febrero de 2011

2 JUAN

2John  1

 1 El anciano a la señora elegida y a sus hijos, a quienes yo amo en verdad--y no Sólo yo, sino también todos los que han conocido la verdad--
 2 a causa de la verdad que permanece en nosotros y que Estarà con nosotros para siempre:
 3 La gracia, la misericordia y la paz de parte de Dios Padre y de Jesucristo, el Hijo del Padre, Estaràn con nosotros en verdad y amor.
 4 Me alegré mucho al hallar de entre tus hijos quienes andan en la verdad, conforme al mandamiento que hemos recibido del Padre.
 5 Y ahora te ruego, señora, no como si te escribiera un nuevo mandamiento, sino el mismo que Teníamos desde el principio: que nos amemos unos a otros.
 6 Y éste es el amor: que andemos Según sus mandamientos. Este es el mandamiento en que habéis de andar, como habéis Oído desde el principio.
 7 Porque muchos engañadores han salido al mundo, quienes no confiesan que Jesucristo ha venido en la carne. Tal persona es el engañador y el anticristo.
 8 Mirad por vosotros mismos para que no Perdàis las cosas en que hemos trabajado, sino que Recibàis abundante recompensa.
 9 Todo el que se Extravía y no permanece en la doctrina de Cristo no tiene a Dios. El que permanece en la doctrina, éste tiene al Padre y también al Hijo.
 10 Si alguien va a vosotros y no lleva esta doctrina, no le Recibàis en casa, ni le Digàis: "¡Bienvenido!"
 11 Porque el que le da la bienvenida participa de sus malas obras.
 12 Aunque tengo muchas cosas que escribiros, no he querido comunicarlas por medio de papel y tinta. Màs bien, espero estar con vosotros y hablar cara a cara, para que nuestro gozo sea completo.
 13 Los hijos de tu hermana elegida te saludan.



domingo, 27 de febrero de 2011

1 JUAN

 1John  1

 1 Lo que era desde el principio, lo que hemos Oído, lo que hemos visto con nuestros ojos, lo que contemplamos y palparon nuestras manos tocante al Verbo de vida
 2 --la vida fue manifestada, y la hemos visto; y os testificamos y anunciamos la vida eterna que estaba con el Padre y nos fue manifestada--,
 3 lo que hemos visto y Oído lo anunciamos también a vosotros, para que vosotros también Tengàis Comunión con nosotros. Y nuestra Comunión es con el Padre y con su Hijo Jesucristo.
 4 Estas cosas escribimos nosotros para que nuestro gozo sea completo.
 5 Y éste es el mensaje que hemos Oído de parte de él y os anunciamos: Dios es luz, y en él no hay ningunas tinieblas.
 6 Si decimos que tenemos Comunión con él y andamos en tinieblas, mentimos y no practicamos la verdad.
 7 Pero si andamos en luz, como él Està en luz, tenemos Comunión unos con otros, y la sangre de su Hijo Jesús nos limpia de todo pecado.
 8 Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y la verdad no Està en nosotros.
 9 Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados y limpiarnos de toda maldad.
 10 Pero si decimos que no hemos pecado, le hacemos a él mentiroso, y su palabra no Està en nosotros.

 1John  2

 1 Hijitos Míos, estas cosas os escribo para que no pequéis. Y si alguno peca, abogado tenemos delante del Padre, a Jesucristo el justo.
 2 El es la Expiación por nuestros pecados, y no solamente por los nuestros, sino también por los de todo el mundo.
 3 En esto sabemos que nosotros le hemos conocido: en que guardamos sus mandamientos.
 4 El que dice: "Yo le conozco" y no guarda sus mandamientos es mentiroso, y la verdad no Està en él.
 5 Pero en el que guarda su palabra, en éste verdaderamente el amor de Dios ha sido perfeccionado. Por esto sabemos que estamos en él.
 6 El que dice que permanece en él debe andar como él anduvo.
 7 Amados, no os escribo un mandamiento nuevo sino el mandamiento antiguo que Teníais desde el principio. El mandamiento antiguo es la palabra que habéis Oído.
 8 Otra vez os escribo un mandamiento nuevo, que es verdadero en él y en vosotros, porque las tinieblas van pasando y la luz verdadera ya Està alumbrando.
 9 El que dice que Està en la luz y odia a su hermano, Està en tinieblas Todavía.
 10 El que ama a su hermano permanece en la luz, y en él no hay tropiezo.
 11 Pero el que odia a su hermano Està en tinieblas y anda en tinieblas; y no sabe a Dónde va, porque las tinieblas le han cegado los ojos.
 12 Os escribo a vosotros, hijitos, porque vuestros pecados han sido perdonados por causa de su nombre.
 13 Os escribo a vosotros, padres, porque habéis conocido al que es desde el principio. Os escribo a vosotros, Jóvenes, porque habéis vencido al maligno. Os he escrito a vosotros, niñitos, porque habéis conocido al Padre.
 14 Os he escrito a vosotros, padres, porque habéis conocido al que es desde el principio. Os he escrito a vosotros, Jóvenes, porque sois fuertes, y la palabra de Dios permanece en vosotros, y habéis vencido al maligno.
 15 No améis al mundo ni las cosas que Estàn en el mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no Està en él;
 16 porque todo lo que hay en el mundo--los deseos de la carne, los deseos de los ojos y la soberbia de la vida-- no proviene del Padre sino del mundo.
 17 Y el mundo Està pasando, y sus deseos; pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre.
 18 Hijitos, ya es la última hora; y como Oísteis que el anticristo Había de venir, Así también ahora han surgido muchos anticristos. Por esto sabemos que es la última hora.
 19 Salieron de entre nosotros, pero no eran de nosotros; porque si hubieran sido de nosotros, Habrían permanecido con nosotros. Pero salieron, para que fuera evidente que no todos eran de nosotros.
 20 Pero vosotros tenéis la Unción de parte del Santo y conocéis todas las cosas.
 21 No os escribo porque Desconozcàis la verdad, sino porque la conocéis y porque ninguna mentira procede de la verdad.
 22 ¿Quién es mentiroso, sino el que niega que Jesús es el Cristo? Este es el anticristo: el que niega al Padre y al Hijo.
 23 Todo aquel que niega al Hijo tampoco tiene al Padre. El que confiesa al Hijo tiene también al Padre.
 24 Permanezca en vosotros lo que habéis Oído desde el principio. Si permanece en vosotros lo que habéis Oído desde el principio, también vosotros permaneceréis en el Hijo y en el Padre.
 25 Y ésta es la promesa que él nos ha hecho: la vida eterna.
 26 Os he escrito esto acerca de los que os engañan.
 27 Y en cuanto a vosotros, la Unción que habéis recibido de él permanece en vosotros, y no tenéis necesidad de que alguien os enseñe. Pero, como la misma Unción os enseña acerca de todas las cosas, y es verdadera y no falsa, Así como os Enseñó, permaneced en él.
 28 Ahora, hijitos, permaneced en él para que, cuando aparezca, tengamos confianza y no nos avergoncemos delante de él, en su venida.
 29 Si sabéis que él es justo, sabed también que todo aquel que hace justicia es nacido de él.

 1John  3

 1 Mirad Cuàn grande amor nos ha dado el Padre para que seamos llamados hijos de Dios. ¡Y lo somos! Por esto el mundo no nos conoce, porque no le Conoció a él.
 2 Amados, ahora somos hijos de Dios, y Aún no se ha manifestado lo que seremos. Pero sabemos que cuando él sea manifestado, seremos semejantes a él, porque le veremos tal como él es.
 3 Y todo aquel que tiene esta esperanza en él, se purifica a Sí mismo, como él también es puro.
 4 Todo aquel que comete pecado también infringe la ley, pues el pecado es Infracción de la ley.
 5 Y sabéis que él fue manifestado para quitar los pecados y que en él no hay pecado.
 6 Todo aquel que permanece en él no Continúa pecando. Todo aquel que sigue pecando no le ha visto ni le ha conocido.
 7 Hijitos, nadie os engañe. El que practica justicia es justo, como él es justo.
 8 El que practica el pecado es del diablo, porque el diablo peca desde el principio. Para esto fue manifestado el Hijo de Dios: para deshacer las obras del diablo.
 9 Todo aquel que ha nacido de Dios no practica el pecado, porque la simiente de Dios permanece en él, y no puede seguir pecando, porque ha nacido de Dios.
 10 En esto se revelan los hijos de Dios y los hijos del diablo: Todo aquel que no practica justicia no es de Dios, ni tampoco el que no ama a su hermano.
 11 Porque éste es el mensaje que habéis Oído desde el principio: que nos amemos los unos a los otros.
 12 No como Caín, que era del maligno y Mató a su hermano. ¿Y por qué causa lo Mató? Porque sus obras eran malas, y las de su hermano eran justas.
 13 Y no os maravilléis, hermanos, si el mundo os aborrece.
 14 Nosotros sabemos que hemos pasado de muerte a vida, porque amamos a los hermanos. El que no ama permanece en muerte.
 15 Todo aquel que odia a su hermano es homicida, y sabéis que Ningún homicida tiene vida eterna permaneciendo en él.
 16 En esto hemos conocido el amor: en que él puso su vida por nosotros. También nosotros debemos poner nuestras vidas por los hermanos.
 17 Pero el que tiene bienes de este mundo y ve que su hermano padece necesidad y le cierra su Corazón, ¿Cómo Morarà el amor de Dios en él?
 18 Hijitos, no amemos de palabra ni de lengua, sino de hecho y de verdad.
 19 En esto sabremos que somos de la verdad y tendremos nuestros corazones confiados delante de él;
 20 en caso de que nuestro Corazón nos reprenda, mayor es Dios que nuestro Corazón, y él conoce todas las cosas.
 21 Amados, si nuestro Corazón no nos reprende, tenemos confianza delante de Dios;
 22 y cualquier cosa que pidamos, la recibiremos de él, porque guardamos sus mandamientos y hacemos las cosas que son agradables delante de él.
 23 Y éste es su mandamiento: que creamos en el nombre de su Hijo Jesucristo y que nos amemos unos a otros, como él nos ha mandado.
 24 Y el que guarda sus mandamientos permanece en Dios, y Dios en él. Y por esto sabemos que él permanece en nosotros: por el Espíritu que nos ha dado.

 1John  4

 1 Amados, no Creàis a todo Espíritu, sino probad los Espíritus, si son de Dios. Porque muchos falsos profetas han salido al mundo.
 2 En esto conoced el Espíritu de Dios: Todo Espíritu que confiesa que Jesucristo ha venido en carne procede de Dios,
 3 y todo Espíritu que no confiesa a Jesús no procede de Dios. Este es el Espíritu del anticristo, del cual habéis Oído que Había de venir y que ahora ya Està en el mundo.
 4 Hijitos, vosotros sois de Dios, y los habéis vencido, porque el que Està en vosotros es mayor que el que Està en el mundo.
 5 Ellos son del mundo; por eso, lo que hablan es del mundo, y el mundo los oye.
 6 Nosotros somos de Dios, y el que conoce a Dios nos oye; y el que no es de Dios no nos oye. En esto conocemos el Espíritu de verdad y el Espíritu de error.
 7 Amados, amémonos unos a otros, porque el amor es de Dios. Y todo aquel que ama ha nacido de Dios y conoce a Dios.
 8 El que no ama no ha conocido a Dios, porque Dios es amor.
 9 En esto se Mostró el amor de Dios para con nosotros: en que Dios Envió a su Hijo unigénito al mundo para que vivamos por él.
 10 En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos Amó a nosotros y Envió a su Hijo en Expiación por nuestros pecados.
 11 Amados, ya que Dios nos Amó Así, también nosotros debemos amarnos unos a otros.
 12 Nadie ha visto a Dios Jamàs. Si nos amamos unos a otros, Dios permanece en nosotros, y su amor se ha perfeccionado en nosotros.
 13 En esto sabemos que permanecemos en él y él en nosotros: en que nos ha dado de su Espíritu.
 14 Y nosotros hemos visto y testificamos que el Padre ha enviado al Hijo como Salvador del mundo.
 15 El que confiesa que Jesús es el Hijo de Dios, Dios permanece en él, y él en Dios.
 16 Y nosotros hemos conocido y Creído el amor que Dios tiene para con nosotros. Dios es amor. Y el que permanece en el amor permanece en Dios, y Dios permanece en él.
 17 En esto se ha perfeccionado el amor entre nosotros, para que tengamos confianza en el Día del juicio: en que como él es, Así somos nosotros en este mundo.
 18 En el amor no hay temor, sino que el perfecto amor echa fuera el temor. Porque el temor conlleva castigo, y el que teme no ha sido perfeccionado en el amor.
 19 Nosotros amamos, porque él nos Amó primero.
 20 Si alguien dice: "Yo amo a Dios" y odia a su hermano, es mentiroso. Porque el que no ama a su hermano a quien ha visto, no puede amar a Dios a quien no ha visto.
 21 Y tenemos este mandamiento de parte de él: El que ama a Dios ame también a su hermano.

 1John  5

 1 Todo aquel que cree que Jesús es el Cristo es nacido de Dios, y todo aquel que ama al que Engendró ama también al que es nacido de él.
 2 En esto sabemos que amamos a los hijos de Dios, cuando amamos a Dios y guardamos sus mandamientos.
 3 Pues éste es el amor de Dios: que guardemos sus mandamientos. Y sus mandamientos no son gravosos.
 4 Porque todo lo que ha nacido de Dios vence al mundo; y ésta es la victoria que ha vencido al mundo: nuestra fe.
 5 ¿Quién es el que vence al mundo, sino el que cree que Jesús es el Hijo de Dios?
 6 Este es Jesucristo, el que vino por agua y sangre; no por agua solamente, sino por agua y sangre. Y el Espíritu es el que da testimonio, porque el Espíritu es la verdad.
 7 Porque tres son los que dan testimonio:
 8 el Espíritu, el agua y la sangre; y estos tres concuerdan en uno.
 9 Si recibimos el testimonio de los hombres, el testimonio de Dios es mayor; porque éste es el testimonio de Dios: que él ha dado testimonio acerca de su Hijo.
 10 El que cree en el Hijo de Dios tiene el testimonio en Sí mismo; el que no cree a Dios le ha hecho mentiroso, porque no ha Creído en el testimonio que Dios ha dado acerca de su Hijo.
 11 Y éste es el testimonio: que Dios nos ha dado vida eterna, y esta vida Està en su Hijo.
 12 El que tiene al Hijo tiene la vida; el que no tiene al Hijo de Dios no tiene la vida.
 13 Estas cosas os he escrito a vosotros que creéis en el nombre del Hijo de Dios, para que Sepàis que tenéis vida eterna.
 14 Y ésta es la confianza que tenemos delante de él: que si pedimos algo conforme a su voluntad, él nos oye.
 15 Y si sabemos que él nos oye en cualquier cosa que pidamos, sabemos que tenemos las peticiones que le hayamos hecho.
 16 Si alguno ve que su hermano comete pecado que no es de muerte, Pedirà, y se le Darà vida; digo, a los que no pecan de muerte. Hay pecado de muerte, acerca del cual no digo que se pida.
 17 Toda maldad es pecado, pero hay pecado que no es de muerte.
 18 Sabemos que todo aquel que ha nacido de Dios no sigue pecando; Màs bien, Aquel que fue engendrado de Dios le guarda, y el maligno no le toca.
 19 Sabemos que somos de Dios y que el mundo entero Està bajo el maligno.
 20 No obstante, sabemos que el Hijo de Dios Està presente y nos ha dado entendimiento para conocer al que es verdadero; y estamos en el verdadero, en su Hijo Jesucristo. Este es el verdadero Dios y la vida eterna.
 21 Hijitos, guardaos de los ídolos.

sábado, 26 de febrero de 2011

2 PEDRO

2Peter  1

 1 Simón Pedro, siervo y Apóstol de Jesucristo; a los que han alcanzado una fe igualmente preciosa como la nuestra por la justicia de nuestro Dios y Salvador Jesucristo:
 2 Gracia a vosotros y paz os sea multiplicada en el conocimiento de Dios y de nuestro Señor Jesús.
 3 Su divino poder nos ha concedido todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad por medio del conocimiento de aquel que nos Llamó por su propia gloria y excelencia.
 4 Mediante ellas nos han sido dadas preciosas y Grandísimas promesas, para que por ellas Seàis hechos participantes de la naturaleza divina, después de haber huido de la Corrupción que hay en el mundo debido a las bajas pasiones.
 5 Y por esto mismo, poniendo todo empeño, añadid a vuestra fe, virtud; a la virtud, conocimiento;
 6 al conocimiento, dominio propio; al dominio propio, perseverancia; a la perseverancia, Devoción;
 7 a la Devoción, afecto fraternal; y al afecto fraternal, amor.
 8 Porque cuando estas cosas Estàn en vosotros y abundan, no os Dejaràn estar ociosos ni estériles en el conocimiento de nuestro Señor Jesucristo.
 9 Pues el que no tiene estas cosas es ciego y tiene la vista corta, habiendo olvidado la Purificación de sus pecados pasados.
 10 Por eso, hermanos, procurad aun con mayor empeño hacer firme vuestro llamamiento y Elección, porque haciendo estas cosas no tropezaréis Jamàs.
 11 Pues de esta manera os Serà otorgada amplia entrada en el reino eterno de nuestro Señor y Salvador Jesucristo.
 12 Por eso, siempre habré de traeros estas cosas a la memoria, aunque vosotros las sabéis y Estàis afirmados en la verdad que Està presente en vosotros.
 13 Pero considero justo estimularos la memoria entre tanto que estoy en esta mi morada temporal.
 14 Pues como sé que dentro de poco tengo que dejar mi Fràgil morada, como me lo ha declarado nuestro Señor Jesucristo,
 15 también procuraré con empeño que, después de mi partida, vosotros Podàis tener memoria de estas cosas en todo momento.
 16 Porque os hemos dado a conocer el poder y la venida de nuestro Señor Jesucristo, no siguiendo Fàbulas artificiosas, sino porque fuimos testigos oculares de su majestad.
 17 Porque al recibir de parte de Dios Padre honra y gloria, desde la grandiosa gloria le fue dirigida una voz: "Este es mi Hijo amado, en quien tengo complacencia."
 18 Y nosotros Oímos esta voz dirigida desde el cielo cuando Estàbamos con él en el monte santo.
 19 También tenemos la palabra profética que es aun Màs firme. Hacéis bien en estar atentos a ella, como a una antorcha que alumbra en lugar oscuro, hasta que aclare el Día y el lucero de la mañana se levante en vuestros corazones.
 20 Y hay que tener muy en cuenta, antes que nada, que ninguna Profecía de la Escritura es de Interpretación privada;
 21 porque Jamàs fue Traída la Profecía por voluntad humana; al contrario, los hombres hablaron de parte de Dios siendo inspirados por el Espíritu Santo.

 2Peter  2

 1 Pero hubo falsos profetas entre el pueblo, como también entre vosotros Habrà falsos maestros que Introduciràn encubiertamente Herejías destructivas, llegando aun hasta negar al soberano Señor que los Compró, acarreando sobre Sí mismos una Súbita Destrucción.
 2 Y muchos Seguiràn tras la sensualidad de ellos, y por causa de ellos Serà difamado el camino de la verdad.
 3 Por avaricia Haràn Mercadería de vosotros con palabras fingidas. Desde hace tiempo su Condenación no se tarda, y su Destrucción no se duerme.
 4 Porque si Dios no Dejó sin castigo a los àngeles que pecaron, sino que, habiéndolos arrojado al infierno en prisiones de oscuridad, los Entregó a ser reservados para el juicio;
 5 y si tampoco Dejó sin castigo al mundo antiguo, pero Preservó a Noé, heraldo de justicia, junto con otras siete personas, cuando trajo el diluvio sobre el mundo de los Impíos;
 6 y si Condenó a Destrucción a las ciudades de Sodoma y Gomorra, reduciéndolas a cenizas y poniéndolas como ejemplo para los que Habían de vivir Impíamente;
 7 y si Rescató al justo Lot, quien era acosado por la conducta sensual de los malvados
 8 --porque este hombre justo habitaba en medio de ellos y Afligía de Día en Día su alma justa por los hechos malvados de ellos--;
 9 entonces el Señor sabe rescatar de la prueba a los piadosos y guardar a los injustos para ser castigados en el Día del juicio.
 10 ¡Y especialmente a aquellos que andan tras las pervertidas pasiones de la carne, y desprecian toda autoridad! Estos atrevidos y arrogantes no temen maldecir a las potestades superiores,
 11 mientras que los àngeles, que son mayores en fuerza y poder, no pronuncian juicio de Maldición contra ellos delante del Señor.
 12 Pero éstos, maldiciendo lo que no entienden, como animales irracionales que por naturaleza han sido creados para presa y Destrucción, también Pereceràn en su Perdición.
 13 Recibiràn injusticia como pago de la injusticia, porque consideran delicia el gozar en pleno Día de placeres sensuales. Estos son manchas y suciedad que mientras comen con vosotros se deleitan en sus engaños.
 14 Tienen los ojos llenos de adulterio y son insaciables para el pecado. Seducen a las almas inconstantes. Tienen el Corazón ejercitado para la avaricia. Son hijos de Maldición.
 15 Abandonando el camino recto, se extraviaron al seguir el camino de Balaam hijo de Beor, quien Amó el pago de la injusticia
 16 y fue reprendido por su iniquidad. ¡Una muda bestia de carga, hablando con voz de hombre, Frenó la locura del profeta!
 17 Son fuentes sin agua y nubes arrastradas por la tempestad. Para ellos se ha guardado la profunda oscuridad de las tinieblas.
 18 Porque hablando arrogantes palabras de vanidad, seducen con las pasiones sensuales de la carne a los que a duras penas se Habían escapado de los que viven en el error.
 19 Les prometen libertad, cuando ellos mismos son esclavos de la Corrupción; puesto que cada cual es hecho esclavo de lo que le ha vencido.
 20 Porque si los que se han escapado de las contaminaciones del mundo por el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo se enredan de nuevo en ellas y son vencidos, el último estado les viene a ser peor que el primero.
 21 Pues mejor les Habría sido no haber conocido el camino de justicia, que después de conocerlo, volver Atràs del santo mandamiento que les fue dado.
 22 A ellos les ha ocurrido lo del acertado proverbio: El perro se Volvió a su propio Vómito; y "la puerca lavada, a revolcarse en el cieno".

 2Peter  3

 1 Amados, ésta es la segunda carta que os escribo. En estas dos cartas estimulo con Exhortación vuestro limpio entendimiento,
 2 para que recordéis las palabras que antes han sido dichas por los santos profetas, y el mandamiento del Señor y Salvador declarado por vuestros Apóstoles.
 3 Primeramente, sabed que en los últimos Días Vendràn burladores con sus burlas, quienes Procederàn Según sus bajas pasiones,
 4 y Diràn: "¿Dónde Està la promesa de su venida? Porque desde el Día en que nuestros padres durmieron todas las cosas siguen igual, Así como desde el principio de la Creación."
 5 Pues bien, por su propia voluntad pasan por alto esto: que por la palabra de Dios Existían desde tiempos antiguos los cielos, y la tierra que Surgió del agua y fue asentada en medio del agua.
 6 Por esto el mundo de entonces fue destruido, inundado en agua.
 7 Pero por la misma palabra, los cielos y la tierra que ahora existen Estàn reservados para el fuego, guardados hasta el Día del juicio y de la Destrucción de los hombres Impíos.
 8 Pero, amados, una cosa no paséis por alto: que delante del Señor un Día es como mil años y mil años como un Día.
 9 El Señor no tarda su promesa, como algunos la tienen por tardanza; Màs bien, es paciente para con vosotros, porque no quiere que nadie se pierda, sino que todos procedan al arrepentimiento.
 10 Pero el Día del Señor Vendrà como Ladrón. Entonces los cielos Pasaràn con grande estruendo; los elementos, ardiendo, Seràn deshechos, y la tierra y las obras que Estàn en ella Seràn consumidas.
 11 Ya que todas estas cosas han de ser deshechas, ¡qué clase de personas debéis ser vosotros en conducta santa y piadosa,
 12 aguardando y Apresuràndoos para la venida del Día de Dios! Por causa de ese Día los cielos, siendo encendidos, Seràn deshechos; y los elementos, al ser abrasados, Seràn fundidos.
 13 Según las promesas de Dios esperamos cielos nuevos y tierra nueva en los cuales mora la justicia.
 14 Por tanto, oh amados, estando a la espera de estas cosas, procurad con empeño ser hallados en paz por él, sin mancha e irreprensibles.
 15 Considerad que la paciencia de nuestro Señor es para Salvación; como también nuestro amado hermano Pablo os ha escrito, Según la Sabiduría que le ha sido dada.
 16 El habla de estas cosas en todas sus Epístolas, en las cuales hay algunas cosas Difíciles de entender, que los indoctos e inconstantes tuercen, como lo hacen también con las otras Escrituras, para su propia Destrucción.
 17 Así que vosotros, oh amados, sabiendo esto de antemano, guardaos; no sea que, siendo desviados por el engaño de los malvados, Caigàis de vuestra firmeza.
 18 Màs bien, creced en la gracia y en el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo. A él sea la gloria ahora y hasta el Día de la eternidad. Amén.

viernes, 25 de febrero de 2011

1 PEDRO

1Peter  1

 1 Pedro, Apóstol de Jesucristo; a los expatriados de la Dispersión en Ponto, Galacia, Capadocia, Asia y Bitinia,
 2 elegidos conforme al previo conocimiento de Dios Padre por la Santificación del Espíritu, para obedecer a Jesucristo y ser rociados con su sangre: Gracia y paz os sean multiplicadas.
 3 Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, quien Según su grande misericordia nos ha hecho nacer de nuevo para una esperanza viva por medio de la Resurrección de Jesucristo de entre los muertos;
 4 para una herencia incorruptible, incontaminable e inmarchitable, reservada en los cielos para vosotros
 5 que sois guardados por el poder de Dios mediante la fe, para la Salvación preparada para ser revelada en el tiempo final.
 6 En esto os Alegràis, a pesar de que por ahora, si es necesario, estéis afligidos Momentàneamente por diversas pruebas,
 7 para que la prueba de vuestra fe--Màs preciosa que el oro que perece, aunque sea probado con fuego-- sea hallada digna de alabanza, gloria y honra en la Revelación de Jesucristo.
 8 A él le Amàis, sin haberle visto. En él creéis; y aunque no lo Veàis ahora, creyendo en él os Alegràis con gozo inefable y glorioso,
 9 obteniendo Así el fin de vuestra fe, la Salvación de vuestras almas.
 10 Acerca de esta Salvación han inquirido e investigado diligentemente los profetas que profetizaron de la gracia que fue destinada para vosotros.
 11 Ellos escudriñaban para ver qué persona y qué tiempo indicaba el Espíritu de Cristo que estaba en ellos, quien predijo las aflicciones que Habían de venir a Cristo y las glorias después de ellas.
 12 A ellos les fue revelado que, no para Sí mismos sino para vosotros, administraban las cosas que ahora os han sido anunciadas por los que os han predicado el evangelio por el Espíritu Santo enviado del cielo; cosas que hasta los àngeles anhelan contemplar.
 13 Por eso, con la mente preparada para actuar y siendo sobrios, poned vuestra esperanza completamente en la gracia que os es Traída en la Revelación de Jesucristo.
 14 Como hijos obedientes, no os conforméis a las pasiones que antes Teníais, estando en vuestra ignorancia.
 15 Antes bien, Así como aquel que os ha llamado es santo, también sed santos vosotros en todo aspecto de vuestra manera de vivir,
 16 porque escrito Està: Sed santos, porque yo soy santo.
 17 Y si Invocàis como Padre a aquel que juzga Según la obra de cada uno sin hacer Distinción de personas, Conducíos en temor todo el tiempo de vuestra Peregrinación.
 18 Tened presente que habéis sido rescatados de vuestra vana manera de vivir, la cual heredasteis de vuestros padres, no con cosas corruptibles como oro o plata,
 19 sino con la sangre preciosa de Cristo, como de un cordero sin mancha y sin Contaminación.
 20 El, a la verdad, fue destinado desde antes de la Fundación del mundo, pero ha sido manifestado en los últimos tiempos por causa de vosotros.
 21 Por medio de él creéis en Dios, quien lo Resucitó de entre los muertos y le ha dado gloria; de modo que vuestra fe y esperanza estén en Dios.
 22 Habiendo purificado vuestras almas en obediencia a la verdad para un amor fraternal no fingido, amaos los unos a los otros ardientemente y de Corazón puro;
 23 pues habéis nacido de nuevo, no de simiente corruptible sino de incorruptible, por medio de la palabra de Dios que vive y permanece.
 24 Porque: Toda carne es como la hierba, y toda su gloria es como la flor de la hierba. La hierba se seca, y la flor se cae;
 25 pero la palabra del Señor permanece para siempre. Esta es la palabra del evangelio que os ha sido anunciada.

 1Peter  2

 1 Habiendo pues dejado toda maldad, todo engaño, Hipocresía, envidia y toda maledicencia,
 2 desead como niños recién nacidos la leche espiritual no adulterada, para que por ella Crezcàis para Salvación;
 3 puesto que habéis probado que el Señor es bondadoso.
 4 Acercàndoos a él, la Piedra Viva--que fue ciertamente rechazada por los hombres, pero delante de Dios es elegida y preciosa--,
 5 también vosotros sed edificados como piedras vivas en casa espiritual para ser un sacerdocio santo, a fin de ofrecer sacrificios espirituales, agradables a Dios por medio de Jesucristo.
 6 Por esto contiene la Escritura: He Aquí, pongo en Sion la Piedra del àngulo, escogida y preciosa. Y el que cree en él Jamàs Serà avergonzado.
 7 De manera que, para vosotros que creéis, es de sumo valor; pero para los que no creen: La piedra que desecharon los edificadores, ésta fue hecha cabeza del àngulo,
 8 y: piedra de tropiezo y roca de Escàndalo. Aquéllos tropiezan, siendo desobedientes a la palabra, pues para eso mismo fueron destinados.
 9 Pero vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, Nación santa, pueblo adquirido, para que anunciéis las virtudes de aquel que os ha llamado de las tinieblas a su luz admirable.
 10 Vosotros en el tiempo pasado no erais pueblo, pero ahora sois pueblo de Dios; no Habíais alcanzado misericordia, pero ahora habéis alcanzado misericordia.
 11 Amados, yo os exhorto como a peregrinos y expatriados, que os Abstengàis de las pasiones carnales que combaten contra el alma.
 12 Tened una conducta ejemplar entre los gentiles, para que en lo que ellos os calumnian como a malhechores, al ver vuestras buenas obras, glorifiquen a Dios en el Día de la Visitación.
 13 Estad sujetos a toda Institución humana por causa del Señor; ya sea al rey como quien ejerce Soberanía,
 14 o a los gobernantes como quienes han sido enviados por él para el castigo de los que hacen el mal y para la alabanza de los que hacen el bien.
 15 Porque ésta es la voluntad de Dios: que haciendo el bien Hagàis callar la ignorancia de los hombres insensatos.
 16 Actuad como libres, y no como los que hacen de la libertad un pretexto para hacer lo malo, sino como siervos de Dios.
 17 Honrad a todos; amad a los hermanos; temed a Dios; honrad al rey.
 18 Siervos, estad sujetos con todo respeto a vuestros amos, no solamente a los que son buenos y comprensivos, sino también a los severos.
 19 Porque esto es aceptable: si alguien soporta Aflicción y padece injustamente por tener conciencia de Dios.
 20 Porque, ¿qué de notable hay si, cuando cometéis pecado y sois abofeteados, lo Soportàis? Pero si lo Soportàis cuando hacéis el bien y sois afligidos, esto Sí es aceptable delante de Dios.
 21 Pues para esto fuisteis llamados, porque también Cristo Sufrió por vosotros, Dejàndoos ejemplo para que Sigàis sus pisadas.
 22 El no Cometió pecado, ni fue hallado engaño en su boca.
 23 Cuando le Maldecían, él no Respondía con Maldición. Cuando Padecía, no amenazaba, sino que se encomendaba al que juzga con justicia.
 24 El mismo Llevó nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero a fin de que nosotros, habiendo muerto para los pecados, vivamos para la justicia. Por sus heridas habéis sido sanados.
 25 Porque erais como ovejas descarriadas, pero ahora habéis vuelto al Pastor y Obispo de vuestras almas.

 1Peter  3

 1 Asimismo vosotras, mujeres, estad sujetas a vuestros maridos, para que si algunos no obedecen a la palabra, también sean ganados sin una palabra por medio de la conducta de sus mujeres,
 2 al observar vuestra reverente y casta manera de vivir.
 3 Vuestro adorno no sea el exterior, con arreglos ostentosos del cabello y adornos de oro, ni en vestir ropa lujosa;
 4 sino que sea la persona interior del Corazón, en lo incorruptible de un Espíritu tierno y tranquilo. Esto es de gran valor delante de Dios.
 5 Porque Así también se adornaban en tiempos antiguos aquellas santas mujeres que esperaban en Dios y estaban sujetas a sus propios maridos.
 6 Así Sara Obedeció a Abraham, Llamàndole señor. Y vosotras habéis venido a ser hijas de ella, si hacéis el bien y no tenéis miedo de ninguna amenaza.
 7 Vosotros, maridos, de la misma manera vivid con ellas con Comprensión, dando honor a la mujer como a vaso Màs Fràgil y como a coherederas de la gracia de la vida, para que vuestras oraciones no sean estorbadas.
 8 Finalmente, sed todos de un mismo sentir: compasivos, Amàndoos fraternalmente, misericordiosos y humildes.
 9 No Devolvàis mal por mal, ni Maldición por Maldición, sino por el contrario, bendecid; pues para esto habéis sido llamados, para que heredéis Bendición.
 10 Porque: El que quiere amar la vida y ver Días buenos refrene su lengua del mal, y sus labios no hablen engaño.
 11 Apàrtese del mal y haga el bien. Busque la paz y Sígala.
 12 Porque los ojos del Señor Estàn sobre los justos, y sus Oídos Estàn atentos a sus oraciones. Pero el rostro del Señor Està contra aquellos que hacen el mal.
 13 ¿Quién es aquel que os Podrà hacer daño, si sois àvidos por el bien?
 14 Pero aun si Llegàis a padecer por causa de la justicia, sois bienaventurados. Por tanto, no Seàis atemorizados por temor de ellos ni Seàis turbados.
 15 Màs bien, santificad en vuestros corazones a Cristo como Señor y estad siempre listos para responder a todo el que os pida Razón de la esperanza que hay en vosotros, pero hacedlo con mansedumbre y reverencia.
 16 Tened buena conciencia, para que en lo que hablan mal sean avergonzados los que se burlan de vuestra buena manera de vivir en Cristo.
 17 Porque es mejor que Padezcàis haciendo el bien, si la voluntad de Dios Así lo quiere, que haciendo el mal.
 18 Porque Cristo también Padeció una vez para siempre por los pecados, el justo por los injustos, para llevarnos a Dios, siendo a la verdad muerto en la carne, pero vivificado en el Espíritu;
 19 en el cual también fue y Predicó a los Espíritus encarcelados
 20 que en otro tiempo fueron desobedientes, cuando en los Días de Noé la paciencia de Dios esperaba, mientras se Construía el arca. En esta arca fueron salvadas a través del agua pocas personas, es decir, ocho.
 21 El bautismo, que corresponde a esta figura, ahora, mediante la Resurrección de Jesucristo, os salva, no por quitar las impurezas de la carne, sino como Apelación de una buena conciencia hacia Dios.
 22 Ahora él, habiendo ascendido al cielo, Està a la diestra de Dios; y los àngeles, las autoridades y los poderes Estàn sujetos a él.

 1Peter  4

 1 Puesto que Cristo ha padecido en la carne, armaos también vosotros con la misma actitud. Porque el que ha padecido en la carne ha roto con el pecado,
 2 para vivir el tiempo que le queda en la carne, no en las pasiones de los hombres, sino en la voluntad de Dios.
 3 Porque ya es suficiente el haber hecho en el tiempo pasado los deseos de los gentiles, habiendo andado en sensualidad, en bajas pasiones, en borracheras, en Orgías, en banqueteos y en abominables Idolatrías.
 4 A ellos les parece cosa extraña que vosotros ya no Corràis con ellos en el mismo desenfreno de Disolución, y por eso os ultrajan.
 5 Ellos Daràn cuenta a quien ha de juzgar a los vivos y a los muertos.
 6 Porque por esto ha sido anunciado el evangelio aun a los muertos, para que sean juzgados en la carne como los hombres, pero vivan en Espíritu Según Dios.
 7 El fin de todas las cosas se ha acercado. Sed, pues, prudentes y sobrios en la Oración.
 8 Sobre todo, tened entre vosotros un ferviente amor, porque el amor cubre una multitud de pecados.
 9 Hospedaos los unos a los otros sin murmuraciones.
 10 Cada uno ponga al servicio de los Demàs el don que ha recibido, como buenos administradores de la multiforme gracia de Dios.
 11 Si alguien habla, hable conforme a las palabras de Dios. Si alguien presta servicio, sirva conforme al poder que Dios le da, para que en todas las cosas Dios sea glorificado por medio de Jesucristo, a quien pertenecen la gloria y el dominio por los siglos de los siglos. Amén.
 12 Amados, no os Sorprendàis por el fuego que arde entre vosotros para poneros a prueba, como si os aconteciera cosa extraña.
 13 Antes bien, gozaos a medida que Participàis de las aflicciones de Cristo, para que también en la Revelación de su gloria os gocéis con regocijo.
 14 Cuando sois injuriados en el nombre de Cristo, sois bienaventurados; porque el glorioso Espíritu de Dios reposa sobre vosotros.
 15 Así que, ninguno de vosotros padezca como homicida, o Ladrón, o malhechor, o por entrometerse en asuntos ajenos.
 16 Pero si alguno padece como cristiano, no se avergüence; Màs bien, glorifique a Dios en este nombre.
 17 Porque es tiempo de que el juicio comience por la casa de Dios. Y si primero comienza por nosotros, ¿Cómo Serà el fin de aquellos que no obedecen al evangelio de Dios?
 18 Y si el justo con dificultad se salva, ¿en qué Irà a parar el Impío y pecador?
 19 Por eso, los que sufren Según la voluntad de Dios, que encomienden sus almas al fiel Creador, haciendo el bien.

 1Peter  5

 1 A los ancianos entre vosotros les exhorto, yo anciano también con ellos, testigo de los sufrimientos de Cristo y también participante de la gloria que ha de ser revelada:
 2 Apacentad el rebaño de Dios que Està a vuestro cargo, Cuidàndolo no por la fuerza, sino de buena voluntad Según Dios; no por ganancias deshonestas, sino de Corazón;
 3 no como teniendo Señorío sobre los que Estàn a vuestro cargo, sino como ejemplos para el rebaño.
 4 Y al aparecer el Príncipe de los pastores, recibiréis la inmarchitable corona de gloria.
 5 Asimismo vosotros, Jóvenes, estad sujetos a los ancianos; y Revestíos todos de humildad unos para con otros, porque: Dios resiste a los soberbios pero da gracia a los humildes.
 6 Humillaos, pues, bajo la poderosa mano de Dios para que él os exalte al debido tiempo.
 7 Echad sobre él toda vuestra ansiedad, porque él tiene cuidado de vosotros.
 8 Sed sobrios y velad. Vuestro adversario, el diablo, como León rugiente, anda alrededor buscando a quién devorar.
 9 Resistid al tal, estando firmes en la fe, sabiendo que los mismos sufrimientos se van cumpliendo entre vuestros hermanos en todo el mundo.
 10 Y cuando Hayàis padecido por un poco de tiempo, el Dios de toda gracia, quien os ha llamado a su eterna gloria en Cristo Jesús, él mismo os Restaurarà, os Afirmarà, os Fortalecerà y os Establecerà.
 11 A él sea el dominio por los siglos. Amén.
 12 Os he escrito brevemente por medio de Silas, a quien considero un hermano fiel, para exhortar y testificar que ésta es la verdadera gracia de Dios. Estad firmes en ella.
 13 Os saluda la iglesia que Està en Babilonia, elegida juntamente con vosotros; también Marcos, mi hijo.
 14 Saludaos unos a otros con un beso de amor. La paz sea con todos vosotros que Estàis en Cristo.

jueves, 24 de febrero de 2011

SANTIAGO

James  1

 1 Santiago, siervo de Dios y del Señor Jesucristo, a las doce tribus de la Dispersión: Saludos.
 2 Hermanos Míos, tenedlo por sumo gozo cuando os encontréis en diversas pruebas,
 3 sabiendo que la prueba de vuestra fe produce paciencia.
 4 Pero que la paciencia tenga su obra completa para que Seàis completos y cabales, no quedando Atràs en nada.
 5 Y si a alguno de vosotros le falta Sabiduría, Pídala a Dios, quien da a todos con liberalidad y sin reprochar; y le Serà dada.
 6 Pero pida con fe, no dudando nada. Porque el que duda es semejante a una ola del mar movida por el viento y echada de un lado a otro.
 7 No piense tal hombre que Recibirà cosa alguna del Señor.
 8 El hombre de doble ànimo es inestable en todos sus caminos.
 9 El hermano de humilde Condición, Gloríese en su Exaltación;
 10 pero el rico, en su Humillación, porque él Pasarà como la flor de la hierba.
 11 Pues se levanta el sol con su calor y seca la hierba, cuya flor se cae, y su bella apariencia se desvanece. De igual manera también se Marchitarà el rico en todos sus negocios.
 12 Bienaventurado el hombre que persevera bajo la prueba; porque, cuando haya sido probado, Recibirà la corona de vida que Dios ha prometido a los que le aman.
 13 Nadie diga cuando sea tentado: "Soy tentado por Dios"; porque Dios no es tentado por el mal, y él no tienta a nadie.
 14 Pero cada uno es tentado cuando es arrastrado y seducido por su propia Pasión.
 15 Luego la baja Pasión, después de haber concebido, da a luz el pecado; y el pecado, una vez llevado a cabo, engendra la muerte.
 16 Mis amados hermanos, no os engañéis:
 17 Toda buena Dàdiva y todo don perfecto proviene de lo alto y desciende del Padre de las luces, en quien no hay cambio ni sombra de Variación.
 18 Por su propia voluntad, él nos hizo nacer por la palabra de verdad, para que fuéramos como primicias de sus criaturas.
 19 Sabed, mis amados hermanos: Todo hombre sea pronto para Oír, lento para hablar y lento para la ira;
 20 porque la ira del hombre no lleva a cabo la justicia de Dios.
 21 Por lo tanto, desechando toda suciedad y la maldad que sobreabunda, recibid con mansedumbre la palabra implantada, la cual puede salvar vuestras almas.
 22 Pero sed hacedores de la palabra, y no solamente oidores, Engañàndoos a vosotros mismos.
 23 Porque cuando alguno es oidor de la palabra y no hacedor de ella, éste es semejante al hombre que mira su cara natural en un espejo.
 24 Se mira a Sí mismo y se marcha, y en seguida olvida Cómo era.
 25 Pero el que presta Atención a la perfecta ley de la libertad y que persevera en ella, sin ser oidor olvidadizo sino hacedor de la obra, éste Serà bienaventurado en lo que hace.
 26 Si alguien parece ser religioso y no refrena su lengua, sino que engaña a su Corazón, la Religión del tal es vana.
 27 La Religión pura e incontaminada delante de Dios y Padre es ésta: visitar a los huérfanos y a las viudas en su Aflicción, y guardarse sin mancha del mundo.

 James  2

 1 Hermanos Míos, tened la fe de nuestro glorioso Señor Jesucristo, sin hacer Distinción de personas.
 2 Porque si en vuestra Congregación entra un hombre con anillo de oro y ropa lujosa, y también entra un pobre con vestido sucio,
 3 y Sólo atendéis con respeto al que lleva ropa lujosa y le Decís: "Siéntate Tú Aquí en buen lugar"; y al pobre le Decís: "Quédate Allí de pie" o "Siéntate Aquí a mis pies",
 4 ¿no hacéis Distinción entre vosotros, y no Venís a ser jueces con malos criterios?
 5 Amados hermanos Míos, Oíd: ¿No ha elegido Dios a los pobres de este mundo, ricos en fe y herederos del reino que ha prometido a los que le aman?
 6 Pero vosotros habéis afrentado al pobre. ¿No os oprimen los ricos, y no son ellos los que os arrastran a los tribunales?
 7 ¿No blasfeman ellos el buen nombre que ha sido invocado sobre vosotros?
 8 Si de veras Cumplís la ley real conforme a las Escrituras: Amaràs a tu Prójimo como a ti mismo, hacéis bien.
 9 Pero si hacéis Distinción de personas, cometéis pecado y sois reprobados por la ley como transgresores.
 10 Porque cualquiera que guarda toda la ley pero ofende en un solo punto se ha hecho culpable de todo.
 11 Porque el que dijo: No cometas adulterio, también dijo: No cometas homicidio. Y si no cometes adulterio, pero cometes homicidio, te has hecho transgresor de la ley.
 12 Así hablad y Así actuad, como quienes Estàn a punto de ser juzgados por la ley de la libertad.
 13 Porque Habrà juicio sin misericordia contra aquel que no hace misericordia. ¡La misericordia se Gloría triunfante sobre el juicio!
 14 Hermanos Míos, si alguno dice que tiene fe y no tiene obras, ¿de qué sirve? ¿Puede acaso su fe salvarle?
 15 Si un hermano o una hermana Estàn desnudos y les falta la comida diaria,
 16 y alguno de vosotros les dice: "Id en paz, calentaos y saciaos", pero no les da lo necesario para el cuerpo, ¿de qué sirve?
 17 Así también la fe, si no tiene obras, Està muerta en Sí misma.
 18 Sin embargo, alguno Dirà: "Tú tienes fe, y yo tengo obras." ¡Muéstrame tu fe sin tus obras, y yo te mostraré mi fe por mis obras!
 19 Tú crees que Dios es uno. Bien haces. También los demonios creen y tiemblan.
 20 Pero, ¿quieres saber, hombre vano, que la fe sin obras es muerta?
 21 ¿No fue justificado por las obras nuestro padre Abraham, cuando Ofreció a su hijo Isaac sobre el altar?
 22 Ves que la fe actuaba juntamente con sus obras y que la fe fue completada por las obras.
 23 Y se Cumplió la Escritura que dice: Abraham Creyó a Dios, y le fue contado por justicia; y fue llamado amigo de Dios.
 24 Veis, pues, que el hombre es justificado por las obras y no solamente por la fe.
 25 De igual manera, ¿no fue justificada también la prostituta Rajab por las obras, cuando Recibió a los mensajeros y los Envió por otro camino?
 26 Porque tal como el cuerpo sin el Espíritu Està muerto, Así también la fe sin obras Està muerta.

 James  3

 1 Hermanos Míos, no os Hagàis muchos maestros, sabiendo que recibiremos juicio Màs riguroso;
 2 porque todos ofendemos en muchas cosas. Si alguno no ofende en palabra, éste es hombre cabal, capaz también de frenar al cuerpo entero.
 3 He Aquí, ponemos freno en la boca de los caballos para que nos obedezcan y dirigimos también su cuerpo entero.
 4 Considerad también los barcos: Aunque son tan grandes y son llevados por impetuosos vientos, son dirigidos con un Timón muy pequeño a dondequiera, Según el antojo del que los conduce.
 5 Así también la lengua es un miembro pequeño, pero se jacta de grandes cosas. ¡Mirad Cómo un fuego tan pequeño incendia un bosque tan grande!
 6 Y la lengua es un fuego; es un mundo de maldad. La lengua Està puesta entre nuestros miembros, y es la que contamina el cuerpo entero. Prende fuego al curso de nuestra vida, y es inflamada por el infierno.
 7 Pues fieras y aves, reptiles y criaturas marinas de toda clase pueden ser domadas, y han sido domadas por el ser humano.
 8 Pero Ningún hombre puede domar su lengua; porque es un mal incontrolable, llena de veneno mortal.
 9 Con ella bendecimos al Señor y Padre, y con ella maldecimos a los hombres, que han sido creados a la semejanza de Dios.
 10 De la misma boca sale Bendición y Maldición. No puede ser, hermanos Míos, que estas cosas sean Así.
 11 ¿Serà posible que de un manantial brote agua dulce y amarga por la misma abertura?
 12 Hermanos Míos, ¿puede la higuera producir olivas, o la vid higos? Tampoco de una fuente de agua salada brota agua dulce.
 13 ¿Quién es sabio y entendido entre vosotros? ¡Que demuestre por su buena conducta sus obras en la mansedumbre de la Sabiduría!
 14 Pero si en vuestros corazones tenéis amargos celos y contiendas, no os jactéis ni Mintàis contra la verdad.
 15 Esta no es la Sabiduría que desciende de lo alto, sino que es terrenal, animal y Diabólica.
 16 Porque donde hay celos y contiendas, Allí hay desorden y toda Pràctica perversa.
 17 En cambio, la Sabiduría que procede de lo alto es primeramente pura; luego es Pacífica, tolerante, complaciente, llena de misericordia y de buenos frutos, imparcial y no Hipócrita.
 18 Y el fruto de justicia se siembra en paz para aquellos que hacen la paz.

 James  4

 1 ¿De Dónde vienen las guerras y de Dónde los pleitos entre vosotros? ¿No surgen de vuestras mismas pasiones que combaten en vuestros miembros?
 2 Codiciàis y no tenéis; Matàis y ardéis de envidia, pero no podéis obtener. Combatís y hacéis guerra. No tenéis, porque no Pedís.
 3 Pedís, y no Recibís; porque Pedís mal, para gastarlo en vuestros placeres.
 4 ¡Gente Adúltera! ¿No sabéis que la amistad con el mundo es enemistad con Dios? Por tanto, cualquiera que quiere ser amigo del mundo se constituye enemigo de Dios.
 5 ¿O suponéis que en vano dice la Escritura: El Espíritu que él hizo morar en nosotros nos anhela celosamente?
 6 Pero él da mayor gracia. Por eso dice: Dios resiste a los soberbios, pero da gracia a los humildes.
 7 Someteos, pues, a Dios. Resistid al diablo, y él Huirà de vosotros.
 8 Acercaos a Dios, y él se Acercarà a vosotros. Limpiad vuestras manos, pecadores; y purificad vuestros corazones, vosotros de doble ànimo.
 9 Afligíos, lamentad y llorad. Vuestra risa se convierta en llanto, y vuestro gozo en tristeza.
 10 Humillaos delante del Señor, y él os Exaltarà.
 11 Hermanos, no habléis mal los unos de los otros. El que habla mal de su hermano o juzga a su hermano habla mal de la ley y juzga a la ley. Y si Tú juzgas a la ley, entonces no eres hacedor de la ley, sino juez.
 12 Hay un solo Dador de la ley y Juez, quien es poderoso para salvar y destruir. Pero ¿quién eres Tú que juzgas a tu Prójimo?
 13 ¡Vamos pues ahora los que Decís: "Hoy o mañana iremos a tal ciudad, estaremos Allà un año y haremos negocios y ganaremos"!
 14 Vosotros, los que no sabéis lo que Serà mañana, ¿qué es vuestra vida? Porque sois un vapor que aparece por un poco de tiempo y luego se desvanece.
 15 Màs bien, Deberíais decir: "Si el Señor quiere, viviremos y haremos esto o aquello."
 16 Pero ahora os Jactàis en vuestra soberbia. Toda jactancia de esta clase es mala.
 17 Por tanto, al que sabe hacer lo bueno y no lo hace, eso le es pecado.

 James  5

 1 ¡Vamos pues ahora, oh ricos! Llorad y aullad por las miserias que vienen sobre vosotros.
 2 Vuestras riquezas se han podrido, y vuestras ropas Estàn comidas de polilla.
 3 Vuestro oro y plata Estàn enmohecidos; su moho Servirà de testimonio contra vosotros y Devorarà vuestra carne como fuego. ¡Habéis amontonado tesoros en los últimos Días!
 4 He Aquí clama el jornal de los obreros que segaron vuestros campos, el que fraudulentamente ha sido retenido por vosotros. Y los clamores de los que segaron han llegado a los Oídos del Señor de los Ejércitos.
 5 Habéis vivido en placeres sobre la tierra y habéis sido disolutos. Habéis engordado vuestro Corazón en el Día de matanza.
 6 Habéis condenado y habéis dado muerte al justo. El no os ofrece resistencia.
 7 Por lo tanto, hermanos, tened paciencia hasta la venida del Señor. He Aquí, el labrador espera el precioso fruto de la tierra, Aguardàndolo con paciencia hasta que reciba las lluvias tempranas y Tardías.
 8 Tened también vosotros paciencia; afirmad vuestros corazones, porque la venida del Señor Està cerca.
 9 Hermanos, no murmuréis unos contra otros, para que no Seàis condenados. ¡He Aquí, el Juez ya Està a las puertas!
 10 Hermanos, tomad por ejemplo de Aflicción y de paciencia a los profetas que hablaron en el nombre del Señor.
 11 He Aquí, tenemos por bienaventurados a los que perseveraron. Habéis Oído de la perseverancia de Job y habéis visto el Propósito final del Señor, que el Señor es muy compasivo y misericordioso.
 12 Pero sobre todo, hermanos Míos, no juréis, ni por el cielo, ni por la tierra, ni por Ningún otro juramento. Màs bien, sea vuestro Sí, Sí; y vuestro no, no; para que no Caigàis bajo Condenación.
 13 ¿Està afligido alguno entre vosotros? ¡Que ore! ¿Està alguno alegre? ¡Que cante salmos!
 14 ¿Està enfermo alguno de vosotros? Que llame a los ancianos de la iglesia y que oren por él, ungiéndole con aceite en el nombre del Señor.
 15 Y la Oración de fe Darà salud al enfermo, y el Señor lo Levantarà. Y si ha cometido pecados, le Seràn perdonados.
 16 Por tanto, confesaos unos a otros vuestros pecados, y orad unos por otros de manera que Seàis sanados. La ferviente Oración del justo, obrando eficazmente, puede mucho.
 17 Elías era un hombre sujeto a pasiones, igual que nosotros, pero Oró con insistencia para que no lloviera, y no Llovió sobre la tierra durante tres años y seis meses.
 18 Y Oró de nuevo, y el cielo dio lluvia, y la tierra produjo su fruto.
 19 Hermanos Míos, si alguno entre vosotros es engañado, Desviàndose de la verdad, y otro le hace volver,
 20 sabed que el que haga volver al pecador del error de su camino Salvarà su vida de la muerte, y Cubrirà una multitud de pecados.